La nave Dawn de la NASA viaja hacia Ceres y Vesta

Vesta y Ceres en comparación con tres asteroides pequeños y con Marte

El lanzamiento de esta nave automática, llamada Dawn, está previsto desde Cabo Cañaveral (Florida) con la perspectiva de recorrer 5.100 millones de kilómetros por el sistema solar en ocho años. Dawn es una misión científica de la NASA desarrollada por el Jet Propulsion Laboratory (California).

A los científicos de Dawn, estadounidenses, italianos y alemanes, poco debe importarles si Ceres es planeta menor o asteroide, como Vesta. Lo que quieren es que la nave se acerque a ellos y que la cámara y los dos sensores de a bordo recojan toda la información posible sobre su densidad, composición, superficie, tamaño, movimiento, etcétera. Con los datos esperan aclarar la historia, que se remonta a 4.500 millones de años, de esos dos cuerpos celestes, muy diferentes entre sí.

Vesta y Ceres forman parte del cinturón de asteroides, una región entre Marte y Júpiter donde hay cientos de miles de pequeños cuerpos que deben ser remanentes de la formación del sistema solar. Vesta, con 578 kilómetros de diámetro máximo y un gigantesco cráter de impacto en el polo sur, es un mundo rocoso, seco, con una superficie que parece haber sufrido cambios en su historia. En Ceres, por el contrario, debe de haber mucha agua helada (el 25% de su composición), su superficie parece primitiva y quizá esté envuelto por una tenue atmósfera. Su diámetro es de 909 kilómetros. Ambos son los dos mayores cuerpos del cinturón de asteroides.

Vesta está ahora a 194 millones de kilómetros de la Tierra, pero Dawn irá dando un rodeo y llegará allí en octubre de 2011, tras tomar impulso en Marte y recorrer 3.100 millones de kilómetros. Estará ocho meses en órbita de ese asteroide, luego encenderá de nuevo los motores y se dirigirá a Ceres; llegará en febrero de 2015 para ponerse también en órbita y estudiar el planeta menor durante seis meses.

La nave seguirá una trayectoria muy larga propulsada por tres motores iónicos- un sistema eléctrico que utiliza xenón como combustible- que aceleran muy lentamente pero pueden funcionar durante mucho tiempo ganando velocidad poco a poco, a diferencia de los cohetes tradicionales. Dawn pesa 1.217 kilos y mide 1,64 - 1,27 - 1,77 metros; los dos paneles solares se extenderán casi diez metros a cada lado después del lanzamiento. El coste de la misión, sin contar el cohete que debe sacarlo de la Tierra, asciende a 253 millones de euros.

Hasta ahora ninguna nave espacial se ha acercado a Vesta y a Ceres, y los astrónomos se han tenido que conformar con ver estos pequeños mundos con telescopios. Sin embargo, es posible que algunos trocitos de Vesta estén en la Tierra, porque el gran cráter que se distingue allí debió producirse en un colosal impacto con otro cuerpo que lanzaría al espacio enormes cantidades de fragmentos; algunos de ellos llegarían a la Tierra como meteoritos.