La vida animal saliĆ³ del agua a rastras |
Hace unos 400 millones de aƱos un animal de cuatro patas saliĆ³ del agua y dio sus primeros pasos en un hĆ”bitat terrestre. Ahora, cientĆficos britĆ”nicos han hecho una reconstrucciĆ³n en 3D del esqueleto de este tetrĆ”podo y han descubierto que, en contra de lo que se pensaba, aĆŗn no podĆa caminar.
“La imagen que estamos acostumbrados a ver en museos y libros de texto de un animal saliendo del agua y caminando como una gran salamandra es totalmente incorrecta”, explica a SINC Stephanie Pierce, autora principal del estudio que publica Nature, e investigadora de la Universidad de Cambridge. “Los resultados del estudio demuestran que este ser no podĆa levantar su cuerpo del suelo”.
Pierce y sus colegas aplicaron las tecnologĆas informĆ”ticas y biomecĆ”nicas mĆ”s punteras al anĆ”lisis de fĆ³siles de Ichthyostega, unos tetrĆ”podos que vivieron hace 360 millones de aƱos. En esta investigaciĆ³n los cientĆficos separaron digitalmente los huesos del animal de la roca que los rodeaba, reconstruyeron el esqueleto usando un software de animaciĆ³n y estudiaron los Ć”ngulos y la amplitud de movimiento de cada articulaciĆ³n.
“Los resultados demuestran que las patas delanteras de los primeros tetrĆ”podos habrĆan sido las primeras en adquirir una funciĆ³n de locomociĆ³n en tierra –explica Pierce–. En cambio las extremidades posteriores habrĆan evolucionando primero como un complemento de la cola para la nataciĆ³n y solo mĆ”s tarde para caminar en tierra”.
“El hecho de que un animal tenga patas no significa que pueda caminar. Para desplazarse fuera del agua Ichthyostega movĆa las dos delanteras a la vez y las usaba como punto de apoyo para arrastrar su cuerpo despuĆ©s”, detalla Pierce.
“Evidentemente este ser se movĆa mejor en el agua –afirma el experto–. Las ‘manos’ le servĆan para sacar la cabeza del agua y respirar y comer y las patas traseras palmeadas y la cola las utilizaba para nadar. En tierra, las patas no le debĆan der ser de mucha utilidad “.
La reconstrucciĆ³n en 3D del esqueleto se realizĆ³ a partir de los tres especĆmenes fĆ³siles de Ichthyostega mejor conservados. Para comprobar la fiabilidad de sus resultados los cientĆficos aplicaron la misma tecnologĆa a animales conocidos, como salamandras y cocodrilos, y comprobaron que tanto el movimiento de las articulaciones como el total del modelo se ajustaban perfectamente a la realidad.
SINC